La riqueza cultural y los secretos ancestrales conservados por las comunidades campesinas se aprecian en la Galería de Arte del Convento Santa Catalina.
Héctor Corrales Marca
La extensa red de caminos perfeccionada por los incas, cuyo objetivo fue el de unir los distintos pueblos del Tawantinsuyu, para su mejor control y administración, “La Ruta Qhapaq Ñan”, goza de una diversa y variada riqueza cultural. Con grandes edificaciones, cuya arquitectura ha sido tema de estudios de grandes estudiosos.
Esta belleza que ha persistido a la creciente metrópoli, aún esconde una serie de tecnologías, que sobreviven en el tiempo, un claro ejemplo es el puente colgante Q’eswachaka, una construcción ubicada sobre el río Apurímac, en la zona de Canas (Cusco), que cada cierto tiempo es renovado por la mano de cuatro comunidades campesinas contiguas al puente.
La elaboración y planificación de este, la riqueza arquitectónica, los valles serranos, se pueden apreciar en la muestra fotográfica que se exhibe en la Galería del Monasterio de Santa Catalina, ubicado en la calle Ugarte. El ingreso es libre.
Dato:
* La muestra permanecerá durante todo el mes de julio. Los horarios de visita son desde las 10:00 horas.http://www.diarionoticias.pe/desarrollo/cultura/137270470871/La%20ruta%20Qhapaq%20%C3%91an,%20el%20camino%20que%20nos%20une
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